lunes, marzo 20, 2006

NO ME LLAMES EXTRANJERO

No me llames extranjero, por que haya nacido lejos,

O por que tenga otro nombre la tierra de donde vengo
No me llames extranjero,
por que fue distinto el seno
O por que acunó mi infancia otro idioma de los
cuentos,
No me llames extranjero si en el amor de una madre,
Tuvimos la
misma luz en el canto y en el beso,
Con que nos sueñan iguales las madres
contra su pecho.

No me llames extranjero, ni pienses de donde vengo,

Mejor saber donde vamos, adonde nos lleva el tiempo,
No me llames extranjero,
por que tu pan y tu fuego,
Calman mi hambre y frío, y me cobije tu techo,

No me llames extranjero tu trigo es como mi trigo
Tu mano como la mía, tu
fuego como mi fuego,
Y el hambre no avisa nunca, vive cambiando de dueño.

Y me llamas extranjero por que me trajo un camino,
Por que nací en otro pueblo,
por que conozco otros mares,
Y zarpé un día de otro puerto, si siempre quedan
iguales en el
Adiós los pañuelos, y las pupilas borrosas de los que dejamos

Lejos, los amigos que nos nombran y son iguales los besos
Y el amor de la
que sueña con el día del regreso.
No me llames extranjero, traemos el mismo
grito,
El mismo cansancio viejo que viene arrastrando el hombre
Desde
el fondo de los tiempos, cuando no existían fronteras,
Antes que vinieran
ellos, los que dividen y matan,
Los que roban los que mienten los que venden
nuestros sueños,
Los que inventaron un día, esta palabra, extranjero.


No me llames extranjero que es una palabra triste,
Que es una palabra
helada huele a olvido y a destierro,
No me llames extranjero mira tu niño
y el mío
Como corren de la mano hasta el final del sendero,
No me llames
extranjero ellos no saben de idiomas
De límites ni banderas, míralos se van
al cielo
Por una risa paloma que los reúne en el vuelo.

No me llames
extranjero piensa en tu hermano y el mío
El cuerpo lleno de balas besando
de muerte el suelo,
Ellos no eran extranjeros se conocían de siempre
Por
la libertad eterna e igual de libres murieron
No me llames extranjero, mírame
bien a los ojos,
Mucho más allá del odio, del egoísmo y el miedo,
Y verás
que soy un hombre, no puedo ser extranjero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario